
Plaza Baquedano, cuando era "Plaza Italia" con
el monumento en su centro.
Hoy, quizás no es muy real ni precisa esta división socioeconómica
que el imaginario colectivo santiaguino ha colocado en la mal llamada
Plaza Italia, en realidad Plaza Baquedano, a pesar del
error nominal generalizado que persiste en la comprensión toponímica este
lugar. Sin embargo, el cambio de aspecto y apariencias urbanas sin transiciones precisamente en este punto, ha afianzado tal percepción de un Gran Santiago dividido en dos allí mismo.
Es un hecho, entonces: la tradición oral ha levantado el
muro social precisamente allí, para distinguir a los estratos altos de los más
modestos, en “Plaza Italia pa’arriba” y “Plaza Italia pa’abajo”. La referencia tuvo cierta abundancia también en discursos de los día de la Unidad Popular, quizás terminando de hacerse masiva a principios de los setenta en el uso corriente, hasta nuestros días. Incluso el propio gobierno del Presidente Allende fue atacado alguna vez en los momentos de mayor tensión con los opositores, usando algunos de estos el argumento de que tanto la residencia de Tomás Moro como las de la mayoría de los ministros estaban en el tan vilipendiado territorio al oriente de la Plaza Italia.