
Según
la fuente donde encontré esta foto, la imagen corresponde a un grupo de
jóvenes aristócratas, de "niñitos de bien", celebrando públicamente la
renuncia al Gobierno del General Carlos Ibáñez del Campo en julio de
1931. Nótese que no hay gente con aspecto de trabajadores ni obreros en
el entorno. Una de las pocas veces en que el cuiquerío nacional se ha
animado a salir a manifestarse en las calles de Santiago (la última vez,
fue cuando Uds. ya saben...).
En febrero de este año, un diario español puso el grito en el cielo
cuando una periodista descubrió que acá en Chile, entre los blogs de
"cuicas" (como
pelolais.blogspot.com), las chiquillas de estratos
socioeconómicos altos se habían autodefinido como "pelolais" y
"ondulais", concentradas en una especie de club de rubias altas,
delgadas y típicamente representantes de las clases más acomodadas de
nuestra sociedad. No más distintas de las que diariamente muestra la
publicidad en la TV, por cierto, trayendo a muchas de ellas desde la
Argentina para vender ofertas de tiendas o nuevas cervezas.